Por Emiliano Naya
Avenged Sevenfold vuelve a la Argentina el próximo 25 de septiembre en el Movistar Arena, marcando su tercera visita al país. La relación con el público local comenzó en 2011 en el Estadio Malvinas Argentinas y se reafirmó en 2014 con un Luna Park repleto. Ahora, tras más de una década sin presentaciones en Buenos Aires, el regreso los encuentra como una banda en plena madurez artística, con un repertorio que combina clásicos y el material más arriesgado de su carrera.
La historia de A7X está signada por giros de guión y golpes de timón voluntarios e involuntarios. Formados en California a fines de los noventa, encontraron su punto de quiebre con “Waking the Fallen” (2003) y dieron el salto definitivo con “City of Evil” (2005), donde dejaron atrás el Metalcore inicial para abrazar un Heavy Metal más clásico y melódico. Con hits como “Bat Country” o “Beast and the Harlot” se ganaron un lugar en la escena global, mostrando una ambición que no tardó en llevarlos a los grandes festivales.
El grupo también supo sobreponerse a la tragedia. La muerte del baterista Jimmy “The Rev” Sullivan en 2009 derivó en “Nightmare” (2010), un álbum oscuro y emocional que se convirtió en su primer número uno en Billboard. A partir de allí, consolidaron su estatus con “Hail to the King” (2013), abrazando un sonido más clásico y accesible, y con “The Stage” (2016), donde exploraron terrenos progresivos y conceptuales vinculados a la ciencia y la tecnología.
Su trabajo más reciente, “Life Is But a Dream…” (2023), es probablemente el más experimental de su carrera. Combina metal con influencias de Jazz, Electrónica y Progresivo, y se inspira en la filosofía existencialista de Albert Camus. Aunque polarizó a parte de su base de fans, consolidó la idea de que Avenged Sevenfold no teme a reinventarse, incluso a riesgo de incomodar. En vivo, cortes como “Game Over”, “Mattel” y “Nobody” se han vuelto parte central de sus setlists, conviviendo con clásicos infaltables.
La cita de septiembre, entonces, será la oportunidad ideal para ver a una banda que se reinventó a lo largo de dos décadas, que superó tragedias y cambios de rumbo, y que hoy combina potencia, virtuosismo y un concepto visual cuidado. El público argentino tendrá la chance de volver a conectar con un grupo que marcó a toda una generación y que sigue decidido a ocupar un lugar central en la escena del Metal Moderno.
Top 5 Avenged Sevenfold
5“Hail to the King” (2013)
Riffs lentos y gancheros pensados para corear en estadios. “This Means War” es casi un calco de “Sad But True” y abundan guiños a AC/DC, Guns N’ Roses, Sabbath e Iron Maiden.
4“Avenged Sevenfold” (2007)
Transición hacia un sonido más groovero y macabro, con el clásico “A Little Piece of Heaven”. “El disco blanco” es para muchos su mejor trabajo, quizás, por ser el último con The Rev.
3“Nightmare” (2010)
Duelo y catarsis tras la pérdida de The Rev que dejó partes de batería y voces usadas como tributo. Mike Portnoy grabó el resto y giró con la banda en 2010, antes de la llegada de Arin Ilejay. Oscuridad y melodía.
2“Waking the Fallen” (2003)
El disco que consolidó la formación clásica, primero con Synyster Gates y Johnny Christ. Metalcore melódico, pero con claras intenciones de trascenderlo. Crudo y con riffs veloces.
1“City of Evil” (2005)
El salto al Heavy Metal de estadios, con solos exuberantes y “Bat Country” como himno. M. Shadows dejó atrás los guturales y la banda definió su identidad como bandera de su generación.
- Avenged Sevenfold se presenta el 25 de septiembre en el Movistar Arena